CAFÉ VERDE

El cafeto es un arbusto que produce frutos llamados cerezas de café. Después de cosechadas, estas cerezas se exponen al sol durante el tiempo necesario hasta su secado.

Cuando está seca, la pulpa de las cerezas se rompe y se liberan los granos contenidos en el interior. Ésto es lo que se conoce como el café verde.

Cuando el café está destinado a la elaboración de la bebida del mismo nombre, los granos se envían a fábricas especializadas en el procedimiento de tostado.

El tostado consiste en someter el café verde a temperaturas elevadas durante algunos segundos o minutos para que se liberen todos los aromas, con lo cual se aumenta la calidad gustativa, pero esto hace que determinados componentes del café verde se destruyan durante este proceso.

Uno de los compuestos es el ácido clorogénico, un polifenol presente en las plantas superiores.

El ácido clorogénico responde al estrés medioambiental. Cuando un fruto o una hoja se dañan, él es el que se ocupa de reparar esos desgarros o cortes.

Generalmente, la cantidad de este ácido en las plantas se encuentra en cantidades demasiado pequeña para tener efectos en el ser humano cuando ésta se ingiere a través de la dieta.

Los ácidos clorogénicos están presentes en una gran cantidad de alimentos que consumimos cotidianamente. Sin embargo, ocasionalmente el ácido clorogénico se encuentra en mayores proporciones en algunos frutos y semillas y en estos casos sí puede tener efectos fisiológicos.

Ésto es lo que ocurre, por ejemplo en el café sin tostar, o café verde, que contiene entre un 6% y un 7% de ácido clorogénico.

Al ácido clorogénico se le han atribuido muchas propiedades y algunas han podido ser evidenciadas en estudios clínicos.

Se ha encontrado que el extracto de café verde puede inducir a la pérdida de peso, e incrementa la masa magra con respecto al índice de masa grasa en voluntarios con problemas de sobrepeso.

El extracto de café verde descafeinado no solamente permite disminuir la absorción de glucosa en el intestino, sino que además favorece que el cuerpo utilice la materia grasa como fuente de energía, reduciendo el fenómeno de la glucogenolisis del hígado mediante la inhibición de la enzima glucosa-6-fosfatasa.