¡CUIDA TU BOCA!

¡La boca es para toda la vida! 

¡Cuídala!

La boca es para toda la vida y además, ejerce una influencia directa en la salud cardiovascular.

Para prevenir la aparición de enfermedades periodontales, es importante extremar la higiene bucal, para eliminar la placa bacteriana o sarro, que es el principal agente responsable de la periodontitis.

¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de tener una buena higiene bucal? 
 

Os lo contamos en cinco sencillos pasos:

1. Además de cepillarse los dientes después de cada comida, hay que cambiar el cepillo en cuanto las cerdas comiencen a abrirse, que suele ser aproximadamente a los 3 meses. Llegado a este punto el cepillado empieza a perder eficacia.
2. Si se padece algún problema periodontal, como el sangrado de encías, se recomienda colocar el cepillo de modo en que sus filamentos formen un ángulo de 45 grados con la superficie dentaria y realizar movimientos circulares y laterales con suavidad.
3. Es importante utilizar seda dental al menos una vez al día, pero se debe hacer de forma correcta. El hilo debe introducirse entre los dientes con un suave movimiento de "sierra" para no generar una herida. Una vez que esté al borde de las encías, hay que curvarlo en forma de "C" contra uno de los dientes y deslizarlo en el espacio entre el diente y la encía. Se debe realizar esta operación entre cada diente con un trozo de hilo nuevo.
4. Las personas que sufren una enfermedad periodontal avanzada, presentan huecos demasiado grandes para que se puedan limpiar con seda dental, por lo que es necesario sustituirlo por un cepillo interproximal.
5. Es fundamental realizar visitas periódicas al odontólogo para que vigile la salud de las encías y para que haga una limpieza en produndidad al menos una vez al año.

Aún teniendo en cuenta estos cinco aspectos, existen siete grupos de la población con un mayor riesgo de padecer problemas bucales. Te los detallamos a continuación:

ENFERMO CARDIOVASCULAR

 

El primer grupo de población del que vamos a hablar son los enfermos cardiovasculares. Se contempla la periodontitis como un factor de riesgo cardiovascular, indicando que esta infección se asocia con la aparición de disfunción endotelial, aterosclerosis y con un incremento de riesgo de infarto de miocardio e ictus.

Por todo ello, se debe poner en conocimiento del dentista si se padece una enfermedad cardiaca, ya que es primordial que estos enfermos mantengan una boca saludable.

PERSONAS CON DISCAPACIDAD

 

Las personas con discapacidad tienen una mayor probabilidad de sufrir problemas bucodentales. Se debe a la dificultad que muchas de ellas tienen para obtener una adecuada higiene oral, bien por falta de motricidad, bien por presentar dificultades a la hora de expresar sintomatología o por sufrir alteraciones del comportamiento.

 

Además, cabe señalar que algunas discapacidades como podría ser a parálisis cerebral suelen venir acompañadas de problemas como son la maloclusión y defectos en la mineralización del esmalte, lo cual les hace más susceptibles de padecer caries.

 

Por otra parte, las personas que no pueden masticar o mover la lengua a causa de su discapacidad, no se benefician en la misma medida del efecto de autolimpieza que ejerce la saliva.

Añadir a todo lo anterior que, en estas personas en más frecuente la ingesta de fármacos, que pueden causar xerostomía (sequedad bucal) y si se hace de forma sistemática puede producir una reacción adversa llamada hiperplasia gingival que conlleva dolor al masticar, hemorragia gingival, alteración periodontal, oclusión dentaria y trastornos del habla.

 

Os damos tres recomendaciones a tener en cuenta en este grupo de población:

• Se recomienda utilizar cepillos dentales eléctricos o adaptados, pasta dentífrica con alta concentración en fluoruro y seda "super floss" o un irrigador interdental a
  
  presión.
• En caso de necesitar ayuda de otra persona, lo recomendable es que ésta se sitúe detrás del individuo con discapacidad, que estará sentado, con la boca ligeramente inclinada hacia atrás y con la boca abierta.
• Se debe usar un colutorio en spray de clorhexidina en caso de gingivitis o periodontitis. Para aquellos pacientes que puedan tragarse el enjuague, se recomienda utilizar un cepillo o un hisopo para aplicar el enjuague directamente en los dientes.

 

DIABÉTICOS

 

La diabetes triplica el riesgo de padecer periodontitis, por tanto, el odontólogo debe jugar un papel importante en la prevención y diagnóstico precoz de la diabetes.

PERSONAS CON DEPRESIÓN

 

Quien sufre este trastorno tiene mayor probabilidad de padecer enfermedades periodontales que deriven en a pérdida de piezas dentales, ya que uno de los efectos físicos más visibles en este trastorno es la reducción de la secreción de la saliva. Este fluído es básico para la prevención de estas enfermedades, ya que ejerce una acción antibacteriana sobre los dientes, al arrastrar los restos de comida que quedan en la boca gracias a su pH alcalino y a su capacidad de tampón.

Por otra parte, aunque la pérdida de saliva es uno de los síntomas de la enfermedad, la ingesta de algunos fármacos antidepresivos la incrementa. Por lo tanto, debemos tener en cuenta dos aspectos:

• Las personasque sufren este trastorno no deben descuidar el cuidado bucodental, ya que uno de los síntomas de la depresión es la falta de motivación para la realización de las tareas cotidianas, entre las que se incluye la higiene bucodental.
• Por otra parte, el estado de la boca repercute en la alimentación, así que se debe procurar una ingesta suficiente y equilibrada de alimentos ya que la deficiencia de vitaminas y minerales también pueden favorecer la depresión.

 

PERSONAS CON IMPLANTES DENTALES

 

La prevención en el cuidado bucodental tiene una gran importancia cuando existen implantes dentales para poder evitar infecciones y futuras complicaciones preimplantarias.

Algunos factores como la cantidad y la calidad del hueso disponible, infecciones en el tejido oral, una higiene inadecuada y hasta el hábito de fumar influyen en el éxito de este procedimiento, ya que interfiere en el proceso de cicatrización.

 

EMBARAZADAS

 

Los cambios hormonales y metabólicos que se producen a lo largo de la vida de la mujer producen modificaciones muy importantes en la salud bucal de la misma.

Por eso, se aconseja a todas las mujeres la necesidad de realizar controles rutinarios de la cavidad bucal, principalmente en las épocas más críticas de cambios hormonales en la mujer, como la pubertad, el embarazo y el climaterio.

 

Es imprescindible que toda mujer, cuando planifique la posibilidad de un embarazo, acuda al odontólogo previamente.

 

MAYORES

 

Aquí van los consejos que os damos para este grupo de edad:

1. Acudir a revisiones al menos dos veces al año.
2. Cuidar la dentadura postiza: conviene mantener la dentadura limpia y ajustada.
3. Usar un dentífrico especial, ya que las encías se retraen con el paso del tiempo exponiendo las raíces, por lo que las personas mayores son más propensas a padecer sensibilidad dental. Por ello, se debe elegir un dentífrico específico para cada caso: sensibilidad dental, sensibilidad de encías...
4. Realizar enjuagues bucales e ingerir agua: la sequedad bucal o xerostomía es otro de los trastornos más comunes en las personas mayores. Para prevenir la sequedad bucal se aconseja mantener una buena higiene bucal, masticar alimentos para segregar saliva, realizar enjuagues con una solución salina y bicarbonato e ingerir agua a menudo.
5. Consumir alimentos que sean fáciles de masticar: conviene tomar poco azúcar y mucho calcio y verduras. Es recomendable evitar los alimentos duros.
6. Usar cepillos eléctricos si fuera necesario: indicado sobre todo en aquellas personas que tengan dificultad para cepillarse.

Fuente bibliográfica: revista Consejos de tu Farmacéutico. Nº180. Febrero 2015.